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Antes de las ocho de la mañana, mientras el Poder Judicial anunciaba que el juez supremo Segismundo León suspendía por dos años a Patricia Benavides de sus funciones como fiscal suprema y fiscal de la Nación, en la sede principal del Ministerio Público se mantenía un ambiente de silencio. A diferencia de otras ocasiones, su grupo de apoyo no se hizo presente.
Hasta ese momento, se esperaba que la Junta Nacional de Justicia (JNJ) ejecutara su disposición —incluso con apercibimiento— para restituirla en el cargo. Sin embargo, el fallo de la Corte Suprema frustró cualquier intento de reposición. La medida dejó sin efecto esa maniobra y desactivó también el respaldo activo de sus simpatizantes.
En contraste, solo se presentó un grupo frente al edificio del Ministerio Público: quienes apoyan a Delia Espinoza, actual fiscal de la Nación. Con parlantes y arengas, alrededor de 20 personas celebraron la continuidad de Espinoza, conscientes de que si la resolución del juez León no se publicaba antes de las 8:00 a.m., la JNJ habría procedido con la restitución de Benavides, incluso con ayuda policial.
En declaraciones a Perú21, Humberto Abanto, abogado de Benavides, señaló que la resolución emitida por el juez León —dictada en menos de 24 horas— aún puede ser revertida. Explicó que tras presentar la apelación, la audiencia debería realizarse en un plazo mínimo de 30 días, aunque consideró que, en coherencia con la celeridad del juez, la sala de la Corte Suprema podría resolverla también en 24 horas. La defensa espera que la medida sea revocada y se restituya la situación previa al fallo, es decir, al momento en que la JNJ ordenó el retorno de Benavides. Mientras tanto, la restitución queda suspendida por 24 meses.
