El Gobierno de Gustavo Petro radicó este lunes 8 ante el Congreso de Colombia un proyecto de ley para que los ricos paguen más impuestos y...
El Gobierno de Gustavo Petro
radicó este lunes 8 ante el Congreso de Colombia un proyecto de ley para que
los ricos paguen más impuestos y financiar con nuevos recursos sus ambiciosos
programas sociales contra la pobreza y la inequidad, una de las más altas del
continente.
El equipo económico del
presidente Petro presentó la reforma tributaria al Legislativo de mayoría
oficialista tras instalarse en el poder el domingo por un periodo de cuatro
años.
La iniciativa busca “fortalecer
la tributación de los sujetos con mayor capacidad contributiva” y reducir las
exenciones a “los más pudientes”, según un resumen oficial compartido a los
medios.
El ministro de Hacienda, José
Antonio Ocampo, explicó que la carga impositiva recaerá sobre las personas
naturales que ganen más de 10 millones de pesos mensuales (unos 2.300 dólares),
que representan el 2,4% de la población de 50 millones de habitantes.
“El mayor aumento es solamente
para unas 34.000 personas” consideradas como los “ultraprivilegiados en el
sistema tributario colombiano”, agregó Ocampo.
También fija nuevos impuestos al
patrimonio, bebidas azucaradas y productos ultraprocesados como embutidos, a
las herencias y ganancias ocasionales, como premios de lotería.
Con la reforma, el Gobierno de
Petro aspira percibir 25 billones de pesos para 2023 (US$ 273.000 millones), lo
que equivale al 1,72% del PIB, y 50 billones para 2026 mediante una recaudación
más efectiva.
Según el Gobierno, los ingresos
tributarios representan hoy el 13% del PIB, por debajo del promedio de
Latinoamérica (14,8%).
Petro llegó al poder con un plan
de reformas profundas que apuntan a fortalecer al Estado, reducir la pobreza
que castiga al 39% de los colombianos y acortar la brecha entre ricos y pobres,
la más amplia de la región, según el índice de desigualdad de Gini.
Sin embargo, recibe unas finanzas
duramente golpeadas por la pandemia, con un déficit fiscal estimado del 5,6%
del PIB para este año y una deuda pública que ronda el 56,5%.
En 2021, el Gobierno de Iván
Duque intentó gravar a la clase media para hacer frente los estragos de la
crisis sanitaria, lo que desató violentas protestas que se extendieron por dos
meses y dejaron 46 muertos, entre civiles y policías, según la ONU.
FUENTE : LA REPÚBLICA